Por: Redacción/

En el debate final sobre Haití este jueves en el Consejo de Seguridad, Sandra Honoré, la representante especial del Secretario General de la ONU y jefa de la Misión de Estabilización en el país (MINUSTAH), aseveró que, tras 13 años y medio, el país goza de mayor estabilidad y padece menos inseguridad.

Creada en el 2004, la MINUSTAH termina su mandato el próximo 15 de octubre. Dejará paso a la nueva Misión de la ONU de Apoyo a la Justicia en Haití (MINUJUSTH), creada por el Consejo de Seguridad con el propósito de consolidar los avances logrados mediante el robustecimiento de las instituciones y el estado de derecho, el desarrollo de la policía y el fortalecimiento de los derechos humanos.

A pesar de existir todavía muchos desafíos, la población del país caribeño goza de mayor seguridad y la violencia política ha disminuido de “manera considerable”, afirmó Honoré.

“Los haitianos ya no son rehenes de las pandillas armadas. Las fuerzas policiales, que cuentan ahora con 14.000 miembros, han crecido no solamente en cantidad sino también en capacidad y ya están establecidas las tres ramas del poder”, agregó.

“Sin embargo, esos son solo los primeros pasos. Son necesarios esfuerzos incansables por parte no solamente de las autoridades, sino también de todos los actores haitianos para consolidar esas ganancias, asegurar la sostenibilidad de la estabilidad política, además de sostener y reforzar el funcionamiento de las instituciones democráticas “, afirmó.

La representante especial saludó las reformas iniciadas por el presidente Jovenel Moïse, especialmente su plataforma “Caravana para el Cambio”.

Asimismo, en una entrevista con Noticias ONU, Honoré alentó al país a utilizar la nueva misión creada en apoyo a la justicia en Haití para “avanzar con la consolidación del estado de derecho en el interés del pueblo haitiano”.

La Misión de la ONU en Haití fue desplegada en 2004 tras la propagación a gran parte del territorio nacional de un conflicto armado que había empezado en la ciudad de Gonaïves.