Por: Redacción/

Un día antes de recibir Luz Mercedes Acosta la medalla de bronce de los Juegos Olímpicos Londres 2012, la ex halterista se reunió con Carlos Padilla Becerra, presidente del Comité Olímpicos Mexicano (COM).

“Siento que soy bendecida de Dios, bendecida de la vida, del destino, muy contenta y agradecida. Aquí fue donde empezó y aquí es donde está terminando otra vez”, mencionó la sonorense.

La ex pesista, quien representó a México en diferentes eventos internacionales como Juegos Centroamericanos, Panamericanos y Campeonatos Mundiales, dijo que está contenta porque será la tercera medallista olímpica, luego que Soraya Jiménez obtuvo metal dorado en Sydney 2000 y Damaris Aguirre consiguió bronce en Beijing 2008.

Expuso que es una satisfacción, un logro y un orgullo ser parte de la historia “porque viví esa historia y sé que por algunas circunstancias seré recordada”.

Una medalla no me hace ni mejor, ni peor. Yo sentía internamente que tenía como un hueco en el corazón, no porque no estuviera contenta por todo lo que había logrado, sino porque tenía esa sensación como que había quedado a deber algo a las pesas. Hice hasta lo imposible, aunque no me iba mal, había un pendiente”, indicó.

Agregó que la vida es buena y tarde o temprano “si te esfuerzas, si trabajas con honestidad, con las manos limpias, hay una recompensa. Las cosas no salen cuando tu las quieres, pero el sentimiento de justica empieza a crecer más”.

Acosta señaló que Londres 2012 es recordar los sin sabores que vivió con un resultado de éxito, mientras que el Comité Olímpico Mexicano le significa regresar a su casa, y que una medalla olímpica es un sueño hecho realidad.

Luz está contenta y completa por lo que logró en su carrera deportiva, ahora disfruta su etapa personal. “Me falta un bebé, ya me casé, ya tengo una medalla olímpica, y todas las etapas se disfrutan, estoy lista para la que sigue”.

Concluyó que Luz Mercedes Acosta es una persona que lucha por sus ideales, por salir adelante “buscar que las cosas salgan bien, hay momento malos, pero ahora estoy más convencida de que existen los valores olímpicos y la justicia”.