Por: Iudex/

Rusia 2018 pasará a la historia por ser la primera en utilizar la repetición instantánea para cambiar una decisión que se posiblemente haya tomado de mala manera pero, más allá de estar satisfechos con el resultado de este aparato, se han generado un sin fin de dudas gracias a la mala aplicación del mismo.

La duda principal es: “¿Cuándo se aplica el VAR?” y la respuesta no es tan sencilla como parece. Si bien el manual de la FIFA nos dice que se aplica en cuatro escenarios como lo son tarjetas rojas, penales, goles y error de identidad, todo parece indicar que se aplica cuando el central quiere.

El caso perfecto, desafortunadamente, es César Ramos Palazuelos, el mexicano. En el primer partido de Brasil en esta Copa del Mundo, cuando derrotó a Suiza, hubo una jugada clara de penal pero el nazareno decidió no marcar absolutamente nada y dejó seguir la jugada.

¿Entonces dónde queda el VAR? En este caso en específico puedo asegurarles que se ignoró. A menos que el central, abanderados VAR y AVAR’s hayan coincidido en que no había falta, hubiera estado bien que no se revisara, pero el contacto existió, la jugada se ve y Ramos, decidió no volver a ver la jugada.

Otro tema son las posibles expulsiones. Una y otra vez hemos visto entradas que llegan al debate por la fuerza desmedida o la intención y que solamente son castigadas con tarjeta amarilla. Si bien el VAR ya hubiera cambiado varias decisiones, en ninguna de ellas se ha usado, ya que lo principal es la interpretación del central, por lo tanto, el VAR se anula.

¿Se puede usa el VAR en este caso? la respuesta es sí, siempre y cuando el central quiera. Cabe señalar que el VAR y AVAR’s solamente pueden aconsejarle al central revisar la jugada y solo si este lo acepta, la jugada en cuestión se analizará y se mantendrá o cambiará la decisión.

Ya para terminar este mundo de confusiones que se irán solucionando poco a poco, queda añadir que las jugadas de gol son las que más se pueden analizar, ya que se buscan posibles faltas, fueras de lugar o alguna otra incorrección que lleve a la cancelación de la anotación.

Con lo anterior solamente nos queda decir que el VAR sí está entregando resultados, pero por el camino incorrecto. En lugar de traer la claridad que se había prometido, se está logrando un malestar global y una falta de entendimiento mundial por lo subjetivo de su aplicación.

Pero no hay que desesperarnos, el VAR ya no se va a ir y poco a poco se irá entendiendo al cien por ciento su aplicación.