Por: Redacción

La nadadora Fernanda González inició con nuevos bríos el nuevo ciclo olímpico, con el objetivo de competir en cuatro pruebas en los Juegos Centroamericanos Barranquilla 2018.

“El próximo año tendremos el Mundial en Budapest y mis ojos están puestos en los Juegos Centroamericanos de Barranquilla 2018. Son mis competencias favoritas, donde se ve el crecimiento y el avance de las generaciones mexicanas y me encantaría representar a México nuevamente”.

Con éstos, serían sus cuartos Juegos Centroamericanos, señaló la sirena, quien se reunió con Valentín Yanes, director de Proyectos Especiales de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), para detallar sus planes de trabajo a futuro.

Destacó que siempre es bueno venir a la CONADE, ya que es la institución que más me ha apoyado durante mi vida y ahorita con planes nuevos y agregó que dejó de entrenar en Estados Unidos y desde hace dos meses se mudó a la Ciudad de México, por razones tanto emocionales, de cultura y también para aprovechar la altura de la Ciudad de México.

En Barranquilla, la sirena de 26 años planea su participación en las pruebas de 50, 100 y 200 metros dorso, así como en la prueba de relevos.

“Los relevos son las pruebas más emocionantes porque las compartes con otras tres nadadoras y el poder compartir ese triunfo y esa experiencia con ellas es siempre muy grato”, aseveró.

Respecto a su experiencia en Estados Unidos, donde entreno en los últimos meses, explicó que al no ser representante de ese país o de un equipo universitario, no se recibe la misma atención por parte de un fisioterapeuta o un médico.

“Necesitas buscar tus propios recursos, lo bueno es que la CONADE me apoyó mucho. En alguna ocasión llegué a enfermarme, se me bajó la presión y la CONADE inmediatamente localizó una clínica cerca de mí, donde me atendieron. Todo esto son recursos y factores que finalmente te afectan porque no tienes un médico o fisioterapeuta de confianza, como lo tengo aquí en México”.

Al respecto, Fernanda González agradeció el apoyo del director de la CONADE, Alfredo Castillo, de Valentín Yanes, al metodólogo José Eduardo Rodríguez, y por darle seguimiento a mi carrera deportiva y por la confianza que me tienen todavía como nadadora”, concluyó.