Por: Jorge Hernández

Arqueólogos del Programa de Arqueología Urbana (PAU) del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) concluyeron que el piso con relieves de la Plaza Manuel Gamio ubicada en el Centro Histórico de la Ciudad de México, fue parte de un patio aledaño al Templo de Huitzilopochtli, donde en la época de Moctezuma Ilhuicamina, los mexicas posiblemente incineraban a los guerreros caídos en batalla.

De acuerdo con el INAH, los antropólogos dedicados al estudio de este hallazgo, dedujeron que el piso de lajas de tezontle contenía una gran carga simbólica ya que representa el “Coaxalpan”, que significa “Sobre el suelo arenoso de las serpientes”, uno de los lugares vinculados al mito del nacimiento del dios solar Huitzilopochtli.

“Aunque nosotros sólo vemos relieves, este piso formó parte de un contexto vivo donde se llevaban a cabo ritos en los que interactuaba una serie de elementos: de tipo móvil, de carácter auditivo (cantos, rezos, etcétera) y el uso de aromas, como el del copal. Todo el conjunto nos permite interpretar el espacio”, agregó Lorena Vázquez Vallín, antropóloga adscrita al PAU.

El equipo del PAU, bajo la supervisión del arqueólogo Raúl Barrera Rodríguez descubrió las imágenes de 10 serpientes, un guerrero, dos víctimas sacrificiales, una mariposa con cabeza humana, la mitad de un glifo anular con dos flores, tres divisas de papel plisado, dos ornamentos de turquesa, además de los símbolos de la nube, la flor, el día o la fiesta, el dardo y la guerra sagrada, también se identificó la imagen del decapitado, que se encuentra revestido de los atributos del dios guerrero Mixcóatl.

Lorena Vázquez Vallín concluyó que con este análisis iconográfico “es posible sostener que este piso era, dentro del contexto general del Templo Mayor, una recreación arquitectónica del mito del Monte Sagrado, parte del citado “Coaxalpan”, pero también fue un espacio funcional con una carga simbólica muy importante”.