Por: MUGS / Redacción

La artista Adela Goldbard, becaria del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca), inaugurará este jueves 22 de octubre la exposición Paraalegorías a las 19:30 horas en la Casa de Lago de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el marco del Festival Internacional de Fotografía.

La exposición, explica su curador Víctor Palacios, está integrada por videos, fotomurales y esculturas que la artista ha producido en los últimos tres años.

Más que un compendio de obras reunidas en el espacio, la exhibición se concibe como una sola instalación en donde procura el diálogo entre los distintos medios utilizados.

Las reconstrucciones escultóricas fueron producidas por Osvaldo Hurtado y la familia Sánchez Contreras, artesanos pirotécnicos del municipio de Tultepec, en el Estado de México, en colaboración con Goldbard.

 

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Cortesía La muestra permanecerá abierta hasta el 14 de febrero de 2016 en la Sala 5 de la Casa del Lago

La materialidad y el trabajo manual, artesanal, de estos artefactos únicos provoca un sugerente diálogo, un contraste con el carácter técnico y reproducible de los videos y los fotomurales.

En entrevista para el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, la artista Adela Goldbard (Ciudad de México, 1979) explicó que gracias al apoyo del Fonca ha llevado a cabo proyectos como el que se presenta en la Casa del Lago, además de permitir la difusión de su trabajo, a través de exposiciones en distintos estados del país.

Para Víctor Palacios, el trabajo que Adela Goldbard ha desarrollado en los últimos años se fundamenta en un meticuloso proceso de investigación y observación de las estrategias de mediatización. La respuesta de Goldbard ante el torbellino mediático es una suerte de sustracción radical, de simplificación y narración paródica en la que, a través de la precaria reconstrucción de objetos, edificaciones y sucesos, genera una ambigüedad y un extrañamiento sobre la naturaleza de los hechos o, dicho de otro modo, sobre la historia o versión inmediata de lo acontecido.

También el curador hace referencia a que lejos de buscar recreaciones apegadas a la realidad ofrecida por los medios, esta artista da a sus puestas en escena un carácter que si bien remite a lo alegórico, aquello que construye es algo que pudiera llamarse una paraalegoría. Es decir, una alegoría al margen, una representación que no busca explicar o descubrir algo intangible, abstracto.