Por: Redacción

Poeta intenso, de vanguardia, capaz de apropiarse y transformar el lenguaje, Oliverio Girondo fue recordado en el 11° Gran Remate de Libros en el Auditorio Nacional a medio siglo de su partida del mundo que conoció y describió desde el ejercicio poético en distintas urbes del mundo, pero sobre todo en su natal Buenos Aires, Argentina.

Durante la presentación, “50 años sin Oliverio Girondo”, los poetas Manuel Cuautle y Lorena Garduño recordaron la obra y la vida del autor de uno de los poemas latinoamericanos más célebres, “Espantapájaros”. . Y fue Manuel Cuautle quien dio lectura a la obra más conocida de Girondo:

“No sé me importa un pito que las mujeres/ tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;/un cutis de durazno o de papel de lija./Le doy una importancia igual a cero,/al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco/o con un aliento insecticida./Soy perfectamente capaz de soportarles/una nariz que sacaría el primer premio/en una exposición de zanahorias;/¡pero eso sí! -y en esto soy irreductible/- no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar./Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!”.

Oliverio Girondo, aseguró Manuel Cuautle, “toma el lenguaje y lo asume sin eufemismos. Es un poeta que transforma el lenguaje, que lo toma y lo hace propio. En esto es fenomenal. Es un poeta muy vivo y para mucha gente es importante leerlo si desean escribir poesía o disfrutar la lectura poética”.

En tanto, Lorena Garduño recordó que cuando Girondo publicó “Espantapájaros” vendió cinco mil ejemplares en un mes y que incluso usó un espantapájaros para promover el poemario. “Oliverio crea sin duda la vanguardia en su país”.
En el Foro Sergio González Rodríguez, Manuel Cuautle y Lorena Garduño leyeron también los poemas “Jueves Santo”, “Viernes Santo”, “Las mujeres vampiro”, “Aparición urbana”, “Rebelión de vocablos” y “Todo era amor”, entre otros.

Oliverio Girondo nació en 1891 en Buenos Aires. Colaboró con diferentes revistas porteñas como Plus Ultra, Caras y Caretas y La Nación. Publicó su primer libro, “Veinte poemas para ser leídos en el tranvía”, en una pequeña población francesa en 1922. Murió en 1967.

Entre sus obras están: “Calcomanías” (1925), “Espantapájaros” (1932), “Persuasión de los días” (1942), “Campo nuestro” (1946) y “En la masmédula” (1953).

Cooperativas culturales

Más adelante, también en el Foro Sergio González Rodríguez, se realizó la mesa “Laboratorio para el Fortalecimiento de Cooperativas Culturales Comunitarias”, proyecto promovido por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (SCCDMX).

En este panel, Federico Meza, promotor de la Dirección de Desarrollo Comunitario de la SCCDMX, recordó que este proyecto se inició en 2014 con la colaboración de la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México.

“Se comenzó con un taller de cooperativas culturales con 25 colectivos de Iztapalapa, a partir del cual cada año se han desarrollado cuatro talleres en las delegaciones Iztacalco, Cuauhtémoc y Benito Juárez. En 2016, en la Dirección de Desarrollo Comunitario se decide hacer un proceso de fortalecimiento para proyectos productivos de trabajo y los procesos que se deben de seguir para formar un proyecto cooperativo; entonces, se forma el Laboratorio para el Fortalecimiento de Cooperativas Culturales Comunitarias que opera actualmente”, explicó.

En tanto, Joaquín Cruz, asesor del Laboratorio, sostuvo que las cooperativas culturales “en realidad son poco trabajadas en la economía social como proyecto económico colaborativo, aunque es casi natural que los colectivos culturales puedan desarrollarse como cooperativas”.

En este sentido, subrayó que “no es lo mismo ser una cooperativa que hace ropa o jabones, que una cooperativa de servicios teatrales o musicales”.

En este Laboratorio impulsado por la SCCDMX, añadió, se trabaja en la capacitación de colectivos culturales. “Se fomenta una idea de trabajo colaborativa, lo cual es importante en la sociedad actual. Se busca desarrollar mecanismos, estrategias de posicionamiento y generación de mercados de consumo, para que quienes se dedican al trabajo cultural puedan vivir de esto de manera digna”.

En este proyecto, afirmó, se busca lograr procesos de autogestión y que los modelos de apoyo a las cooperativas culturales sean más específicos y atiendan más a las necesidades de los colectivos. “Se busca en este taller que los proyectos culturales y artísticos logren tener una estructura y un funcionamiento tal que puedan sobrevivir por sí mismos”.

Finalmente, Patricia Vázquez, del colectivo cultural Viva Arte Clown, al hablar de su experiencia en el taller impartido por la Secretaría de Cultura capitalina, dijo que “de pronto uno se da cuenta que pasan los años en el trabajo cultural y no hay un patrimonio ni hay estrategias para que se mantenga el colectivo”.

El taller, aseguró, “me ha permitido entender que de pronto el artista, si pretende vivir de lo que hace, debe profesionalizarse e incluso aprender a cobrar. Me ha permitido entender que hacer cultura implica un proceso, que se debe tener conciencia de trabajo colectivo y trabajar de manera horizontal”.

Lecturas en voz alta y cuentos reúnen a niños y adultos

El penúltimo día del 11º Gran Remate de Libros fue marcado por la participación del público infantil, al igual que de los visitantes adultos, por las lecturas en voz alta y algunas narraciones de una de las grandes obras del escritor Juan Rulfo.

El encuentro editorial realizado en el Auditorio Nacional permitió a los asistentes no sólo adquirir diversos libros; también fungió como una fiesta literaria en la que niños y adultos convergieron entre poesías, cuentos y fábulas en el Centro de Lectura Juan Bañuelos, con las charlas “Mi experiencia lectora” encabezada por Marcela Carrillo y “Lectura colectiva en voz alta de cuentos de Juan Rulfo”, en la voz de Omar Quintana.

Durante la actividad “Mi experiencia lectora”, a cargo del proyecto Círculo de Lectura, el público infantil disfrutó de cuentos como “El príncipe que fue rescatado por un princesa” y “El zorro más sabio”, los cuales tuvieron como objetivo dejarles una moraleja a los niños sobre los estereotipos y el respeto a la pluralidad de ideas.

Por su parte, Omar Quintana en “Lectura colectiva en voz alta de cuentos de Juan Rulfo” recordó al autor de Pedro Páramo, en vísperas del centenario de su nacimiento, con la lectura de cuentos como “No oyes ladrar a los perros”, “Luvina”, “Talpa”, entre otros, encontrados en la primera publicación del autor El llano en llamas.

Al final de la lectura, Omar Quintana aseguró que “si se tomaran los libros de los grandes escritores que han fallecido y se leyeran, los autores jamás morirían”.
Concierto para cerrar la jornada

La jornada en el Foro Sergio González Rodríguez cerró con la presentación de la cantautora Brenda Rosh, quien es originaria de Culiacán, Sinaloa. La compositora cuenta con el disco “Me esconderé” y en sus canciones, que pueden enmarcarse dentro del género pop, muestra influencias de figuras como Alanis Morrisette y Steve Perry.

Brenda Rosh interpretó temas como “Algo imposible”, “Escápate conmigo”, “Esperándote”, “Así como eres” y “Como antes”, entre otras.

Con la participación de 250 expositores y 500 sellos editoriales, el 11° Gran Remate de Libros se llevará a cabo hasta el próximo martes 18 de abril en el Auditorio Nacional, donde el visitante puede encontrar miles de títulos con descuentos de 50 y hasta 80 por ciento y un amplio programa de actividades literarias y artísticas que fomentan la lectura.

Con entrada libre, de las 11:00 a las 19:00 horas, es posible encontrar libros de todos los géneros, como literatura infantil y juvenil, narrativa, cuento, poesía, ensayo y ejemplares con temas especializados, como biografías, medicina, fotografía, diseño y arquitectura, entre otros.