Por: Redacción/

Luz María Herrasti Coqui despliega su visión arquitectónica para dar vida a una serie de claustros del siglo XVI de los alrededores del Popocatépetl, al conjugar los procesos de creación e investigación en una colección de acuarelas llena de color.

El conjunto de monumentos de la época virreinal comprende 30 piezas que estarán expuestas hasta el 28 de enero de 2019 en la Galería de Arte Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en una revalorización de ese tipo de espacios diseminado en la zona a partir de la llegada de los españoles.

En Arquitectura de todos, México mestizo: conventos del siglo XVI en las cercanías del Popocatépetl, la autora traslada a la acuarela sus inquietudes artísticas y despliega su imaginación como profesional de dicha disciplina para dar vida a conventos de las zonas aledañas al volcán en los estados de México, Puebla y Morelos, de los cuales 14 forman parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad.

La riqueza artística que atesoran esas obras monumentales tuvo como preámbulo las pirámides, el juego de pelota, templos, plazas y palacios prehispánicos que han permanecido como huella de los pueblos originarios y, a partir del siglo XVI, la conquista y posterior colonización dieron lugar a construcciones civiles y religiosas en la Nueva España, donde acueductos, templos, capillas y conventos respondieron a otras necesidades y estilos de vida, precisó la maestra en historia del arte Bertha Teresa Abraham.

Los inmuebles que han sobrevivido “representan manifestaciones del mestizaje y conforman nuestro patrimonio monumental, constituyendo fragmentos multiformes de la realidad que –a fuerza de ver– ya no miramos ni valoramos”, por lo que la Casa abierta al tiempo abre sus puertas para continuar la tarea de fortalecer la conciencia, como herederos de un valioso testimonio edilicio que debe trascender y permanecer, en especial luego de los daños que sufrieron por el temblor del 19 de septiembre de 2017, añadió la también museóloga.

De acuerdo con los parámetros de la multidisciplina, la autora ha transformado sus recursos creativos combinándolos con su quehacer como arquitecta e investigadora, lo que se traduce en lienzos llenos de vida, sensibilidad y color, cada uno de los cuales está acompañado de textos que ubican el momento histórico de las edificaciones, dotadas de vistas al campo y huertas agrestes.

La muestra fue presentada por primera vez en San Luis Potosí, en 2003, como parte del XXVI Congreso del Consejo Internacional de Sitios y Monumentos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, y en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México.