Por: Redacción/

A la escritura nunca hay que verla con un valor superior o como sustituta de la oralidad, aseveró Fernando Nava, miembro de la Academia Mexicana de la Lengua (AML), en conferencia magistral realizada dentro del Primer Congreso Internacional de Fomento a la Lectura en Lenguas Indígenas.

Al ofrecer su ponencia “Reflexiones para antes, durante y después de la lectura de un escrito en lengua indígena”el investigador de la UNAM comentó que muchas personas fueron educadas con la idea de sobreponer la escritura a lo oral, por lo que hizo un llamado a erradicar dicha visión reduccionista.

Quien fuera el primer director del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali), comentó que la acción de leer no sólo consiste en mover los ojos sobre las letras, sino en que el lector se anticipe y formule hipótesis, según las características de los textos.

“Los lectores que leen un texto en su lengua originaria son personas bilingües, conscientes del escenario multilingüe que es México. Las lenguas nacionales son elementos que están en las reflexiones de los hablantes”.

Abundó en que un lector al terminar una lectura en su lengua original se esperaría en el mejor de los casos, que experimente, obtenga satisfacciones, gustos y pueda retomar la experiencia.

El investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, lamentó que haya personas en instituciones o en el ámbito gubernamental que creen no hay las razones suficientes para enseñar a leer y escribir a las poblaciones indígenas en su propia lengua, ni a estimular la formación de escritores indígenas.

“Claro que debe enseñarse y estimularse la creación, es un derecho de los hablantes. Debemos transitar y meternos en una idea, en la que del estado de resistencia pasemos a un estado de solución y atención de dificultades.

“Necesitamos la participación de autoridades comunitarias y extracomunitarias, personas que tienen el reconocimiento comunitario del dominio de la lengua, no necesitan ser egresados de un nivel de estudios, y por el lado de los participantes extracomunitarios, algunos académicos nos apuntamos y ojalá los funcionarios correspondientes estén en esta perspectiva”, agregó.

Finalmente hizo referencia a las encuestas que preguntan cuántos libros se leen al año. “Lo que se lee parece sesgado, que sólo hay un tipo de libro y que ese volumen tiene una posibilidad de ser leído, por diversión o esparcimiento y que existe un sólo lector o receptor, esa visión también hay que combatirla”.

El Primer Congreso Internacional de Fomento a La Lectura, tiene lugar en el Teatro Macedonio Alcalá, en Oaxaca. Hasta el sábado 16 de junio especialistas procedentes de Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, España, Inglaterra, Paraguay, Portugal, Venezuela y México expondrán experiencias, propuestas, reflexiones, resultados de investigaciones y buenas prácticas.