Por: Redacción/

En el filme El amigo americano (1977) el cineasta Win Wenders presenta a un Tom Ripley distinto al amante de la buena vida, al plantear a un hombre que manifiesta sentimientos de culpa y se cuestiona cuánto vale la vida, comentó la escritora Ana García Bergua.

Al participar en la tercera sesión del ciclo “Charlas sobre Cine y Literatura: Patricia Highsmith”, organizado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y la Cineteca Nacional, la narradora y cronista fue la encargada de comentar el filme basado en el libro El juego de Ripley (Ripley’s Game), novela policiaca de la autora estadounidense publicada en 1974.

En la película vemos que en una subasta de arte en Hamburgo, Jonathan Zimmermann (Bruno Ganz), un fabricante de marcos para pinturas, se niega a estrechar la mano de Tom Ripley (Dennis Hopper) lo que le molesta y ofende.

El mafioso francés Raoul Minot (Gérard Blain) quiere que Ripley efectué un asesinato, pero éste le propone a Zimmermann como el autor material, ya que padece una grave enfermedad que lo tiene condenado a muerte.

En la charla, García Bergua recordó a la audiencia que Tom Ripley es el protagonista de cinco novelas escritas entre 1955 y 1991 por Highsmith, las cuales han tenido diferentes adaptaciones cinematográficas.

Apuntó que Wenders tenía mucho interés en llevar a la pantalla grande alguna novela de Highsmith pero los derechos cinematográficos no estaban disponibles.

“Patricia Highsmith se enteró que Wenders tenía interés en su obra y tuvieron una reunión en la que la escritora le dijo que acababa de terminar el manuscrito de El juego de Ripley. Wenders lo aceptó y en su adaptación le agregó características de Ripley que aparecieron en novelas anteriores”

En opinión de la autora del libro La bomba de San José, el filme presenta una estética interesante y una autonomía de la novela. “Creo que si se hubiera metido más elementos de la novela para ser fiel a ésta, el filme hubiera fallado. Además, Wenders enriqueció al personaje de Ripley.

“El personaje protagonizado por Dennis Hopper es muy diferente al hombre refinado con una esposa heredera que aparece en la novela. El del filme es un gringo excéntrico azotado y desalineado que ha llevado cada vez más lejos sus límites, quien entra en crisis al meter en líos a una persona que le agrada.”

García Bergua agregó que la película aborda el tema del límite moral y de lo que es capaz de hacer el ser humano. “A Zimmermann le tienden una especie de trampa. Le hacen creer que está empeorando y que debe preocuparse por dejarle una herencia a su esposa e hijo. Creo que todos muestran al final su moral y ética”.

La colaboradora de la revista Este País, resaltó que en la adaptación fílmica el realizador cambió las nacionalidades de los personajes y los lugares de desarrollo, situando la historia en Alemania y Francia.

“A Patricia Highsmith no le gustó la película en un primer momento porque creyó que la adaptación se despegó mucho de planteamiento, pero parece que la vio años después y le agradó”.

Ana García Bergua resaltó que El amigo americano cumple 40 años y en su opinión pasa la prueba del añejo. “Es una película con una narrativa interesante, profunda, con un ritmo estupendo cuya ambientación, escenas y secuencias están muy bien realizadas. Con este filme se reconoce el estilo de Win Wenders y es una invitación a conocer toda su filmografía”.

Finalmente dijo que el audiovisual fue homenaje al cine y a la narrativa, convirtiéndose en una película referencial de los setenta y ochenta, en la que actuaron los directores Gérard Blain, Jean Eustache, Samuel Fuller, Dennis Hopper, Peter Lilienthal,​ Nicholas Ray y Daniel Schmid.

El ciclo “Charlas sobre Cine y Literatura: Patricia Highsmith”, continuará con la proyección El talentoso Mr. Ripley (1999) del cineasta británico Anthony Minghella, con los comentarios de Bibiana Camacho. La cita es el lunes 28 de agosto a las 18:00 en la Sala 4, Arcady Boytler de la Cineteca Nacional. La entrada es gratuita con cortesía solicitada en la taquilla 5.